3 cosas que no pueden faltar en tu negocio de hostelería

1) Una buena climatización: Cuando estés dándole forma a tu local no dudes en contactar con un buen proveedor de aire acondicionado industrial en Santiago para que estudie cuál es la mejor solución en función del tamaño del local y su distribución. Se trata de garantizar que vas a tener la misma temperatura en todo el local y siempre los grados perfectos para cualquier época del año.

El aire acondicionado debe de ser utilizado con cuidado, sin abusar del frío en verano ni del calor en invierno. Pero permitiendo que todo el mundo se sienta a gusto y adaptándose a la cantidad de gente que hay en cada momento en el establecimiento. Una buena instalación es básica para poder conseguir todo esto.

2) Un buen diseño de interiores: Un interiorista puede hacer mucho por tu local. Puede ser un buen arquitecto que se encargue de todo el proyecto y que también esté especializado en la decoración de este. Pero a veces tiene que ser una persona exterior que no tiene nada que ver con el proyecto para la construcción o reforma del local.

El interiorista te ayudará a diseñar todo el interior de tu local, a aprovechar huecos perfectos para los fines imprescindibles en cualquier establecimiento, como el almacenamiento. Y a situar cada cosa en el lugar en el que mejor encaja para que tus clientes sientan como se les da lo mejor en cada momento y los detalles están cuidados hasta lo más mínimo. Así, se sentirán siempre a gusto y querrán volver a tu local a disfrutar del ocio.

3) Una carta diferenciadora: Ofrece a tus clientes algo que solo van a encontrar en tu establecimiento. Puedes tener una carta de bebidas normal, pero tienes que especializarte en algo en concreto y hacer de eso tu insignia. Por ejemplo, puedes especializarte en ofrecer a los desayunos y meriendas repostería casera elaborada en el mismo local. Esto hará que quienes quieren disfrutar de una tarta con todo el sabor y el cariño de lo hecho en casa, acudan a tu local y no a otro.

Si además añades variedades aptas para intolerantes a la lactosa o para celíacos, lograrás hacerte con un tipo de público que no puede acudir normalmente a disfrutar de dulces caseros fuera del hogar porque no hay una oferta que se adapte a ellos.